Por leve que parezca, el dolor articular resulta incapacitante para muchas personas que cada día tienen que lidiar con él desde que se levantan hasta que se acuestan. Es cierto que las molestias y las limitaciones varían de un paciente a otro. Aun así, hay algunos síntomas comunes, como señala el doctor Juan José Lerma Garrido, Jefe de Servicio de Reumatología de Quirónsalud Valencia, que pueden ser "el tener un dolor articular continuo y constante, incluso, estando en reposo".

Este síntoma es indicativo de que algo no va bien en tu salud ósea y puede venir por muchas causas. Hay maneras aliviarlo, siendo una de ellas a través de la alimentación y de los nutrientes porque el dolor en articulaciones y huesos también son indicativos de que te falta vitamina D, la cual desempeña un papel fundamental en la salud ósea. 

Facilita la absorción de calcio en el intestino delgado, así que si te falta esta vitamina, es recomendable la ingesta de huevos, quesos y lácteos en general o pescados grasos como el salmón. Aun así, a veces el cuerpo tiene dificultades para absorber el calcio de los alimentos y, como respuesta, surgen problemas con el sistema óseo y las articulaciones. 

Enfermedades que aparecen por una deficiencia de vitamina D

No se trata de pensar que porque vayas a tomar a vitamina D se vayan a eliminar todas las enfermedades relacionadas con la salud ósea y las articulaciones, pero sí que ayuda a aliviar los síntomas ya que estas enfermedades se han producido por varias causas en las que han intervenido varios factores que van desde la genética, el envejecimiento, estilo de vida sedentario, lesiones o traumatismos hasta otros hormonales como es el caso de la menopausia. Veamos algunas enfermedades que pueden aparecer por una deficiencia de vitamina D.

1. Osteoporosis

La osteoporosis es una enfermedad ósea caracterizada por la disminución de la densidad mineral ósea y el deterioro de la microarquitectura del tejido óseo. La deficiencia de vitamina D es un factor de riesgo importante para el desarrollo de osteoporosis, ya que el calcio es esencial para mantener la fortaleza y la densidad de los huesos. Cuando el cuerpo carece de vitamina D, no puede absorber adecuadamente el calcio de la dieta, lo que resulta en huesos más débiles y susceptibles a fracturas.

2. Raquitismo

El raquitismo es una enfermedad ósea que afecta principalmente a los niños y se caracteriza por el debilitamiento de los huesos debido a una deficiencia de vitamina D, calcio o fósforo. La falta de vitamina D impide la mineralización adecuada del tejido óseo en crecimiento, lo que resulta en deformidades esqueléticas, como piernas arqueadas, deformidades en el pecho y retraso en el crecimiento. El raquitismo puede tener consecuencias graves si no se trata, ya que puede afectar permanentemente la estructura ósea y el desarrollo físico del niño.

3. Dolor y debilidad muscular

La deficiencia de vitamina D también puede afectar los músculos, causando debilidad muscular y dolores musculares generalizados. Los músculos necesitan vitamina D para funcionar correctamente, y la falta de esta vitamina puede interferir con la contracción muscular normal y la función neuromuscular. Esto puede resultar en síntomas como dificultad para subir escaleras, levantarse de una silla o realizar actividades físicas básicas.

4. Articulaciones y enfermedades autoinmunes

Además de su papel en la salud ósea, la vitamina D también puede influir en la salud de las articulaciones y el desarrollo de enfermedades autoinmunes como la artritis reumatoide. Se ha demostrado que la vitamina D tiene propiedades antiinflamatorias y moduladoras del sistema inmunológico, lo que puede ayudar a reducir la inflamación en las articulaciones y disminuir el riesgo de desarrollar enfermedades autoinmunes que afectan las articulaciones.